Siempre acudo a lo mismo, siempre en situaciones no tan gratas, cuando me doy cuenta que tropiezo una y otra vez, como estas situaciones se están volviendo más reiterativas de lo que quisiera, quizás debería volver a escribir, siempre me ayuda, me contiene, acompaña a mi solitario álter ego. Un solo acompañado, un solo que físicamente nunca está solo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario