El
destino sigue tramando todo, cambiando el curso de todo día a día, determinando
las situaciones por consiguiente las acciones, ayer tuve una buena noticia, ese
cambio de horario que me permitirá Dios quiera tenerte una hora más,
disfrutarte un tiempo más. Puede ser que sea una mera coincidencia ¿porque no? Tal
vez, pero se trata de un momento preciso, en esta situación de incertidumbre en
la que me encuentro cualquier señal (ayudadita) la recibo de buena manera.
Quizás corra menos por las escaleras del metro, tal vez no me cambiare de ropa
10 minutos antes de la salida para que cuando llegue la hora ya este fuera
cruzando la pasarela, he enmendado ese error mio de hacerte esperar cuando
tenía la dicha de hablarte a diario y eras para mí todo el tiempo, ojala esta
ayudadita del destino nos haga acercarnos un poquito, necesito de su persona,
de su atención, gracias Dios por este tiempo de emparejamiento de horarios que
me hace tener un poquito de más esperanza, te adoro por los siglos de los
siglos, amén.
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